Estamos, no hay duda, ante un alimento con numerosas propiedades nutricionales. Tal y como nos cuenta la farmacéutica Meritxell Martí, el limón es “una buena fuente de vitamina C, así como de vitamina B, potasio, calcio, magnesio, fósforo, hierro y fibra”. Entre sus funciones destaca, por ejemplo, mejorar la absorción de hierro, así como la resistencia a los resfriados y estimular el sistema inmune. Hemos contado con la ayuda de la experta para resumir algunos sencillos remedios caseros que se pueden realizar con este cítrico.

En invierno, para mejorar las defensas y evitar los resfriados los podemos añadir en la dieta. Una buena opción es utilizarlo en los aliños, sustituyendo al vinagre. Y es que el limón aporta vitamina C para estimular el sistema inmunitario. Además, Meritxell Martí nos explica que cuando tenemos carencia de hierro, tomarlo junto un zumo de limón, aumenta o mejora su absorción.

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Se puede preparar un sugar scrub de forma sencilla, que incluye zumo de limón, azúcar y unas gotas de glicerina. Con estos ingredientes, se prepara una pasta suave que se masajea en los labios, de forma suave, con las yemas de los dedos.

También tu pelo puede beneficiarse de las propiedades del limón. Así, puedes utilizarlo para aclarar el pelo cuando es graso. Tras lavarse el pelo, ayudará a regular la grasa, mantenerlo más tiempo limpio y aumentar su brillo. Se puede aplicar el zumo de limón mezclado con agua, para después aclarar el cabello.

Una buena alternativa es una infusión de jengibre con limón, para mejorar las digestiones y los posibles mareos. El limón es equilibrante del PH del organismo, y aunque tenga sabor ácido, mejora el sistema digestivo disminuyendo el problema de los gases y la inflamación del estómago.

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También ayuda si padecemos afonía o tos añadiendo una cucharadita de miel. Meritxell Martí nos da incluso una receta del jarabe casero, que se consigue mezclando: 100 gr miel cruda, 50 gr de zumo de limón, 50 gr de infusión hecha con jengibre fresco (3 rodajas) y la piel de medio limón. Se puede tomar para calmar la tos (en el caso de que sea irritativa o seca) a cucharadas o sorbitos.

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La farmacéutica recomienda recurrir a un clásico como es el agua con limón, a la que sugiere añadir canela para conseguir este efecto positivo sobre el estado de ánimo. La mezcla aporta energía y mejora el estado de ánimo, debido sobre todo al aroma de este cítrico, que ayuda a clarificar la mente y a reducir la ansiedad.

También nuestras uñas pueden beneficiarse del uso de este cítrico, en concreto como blanqueador. Y es que cuando las encontramos secas y quebradizas, suelen verse más amarillentas. Para blanquearlas, podemos hacer una receta casera fácil: zumo de un limón al que se añade una cucharadita de bicarbonato de sodio. Con ello conseguimos una pasta ligera. Con un cepillo de dientes suave se cepilla y se mantiene unos diez minutos. Tiene un pequeño inconveniente: si tenemos alguna heridita, va a picar, por lo que en esos casos es mejor no recurrir a este remedio y esperar a que cure la herida. En lugar de limón, también se puede usar aceite de vinagre de manzana. 

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Son uno de los caballos de batalla para muchas mujeres, que buscan estrategias para conseguir acabar con ellas o, al menos, mitigar su apariencia. Aplicar zumo de limón mezclado con unas gotas de aceite de oliva, de coco o de aceite de rosa mosqueta, ayudará a eliminar manchas y a exfoliar de forma muy suave. Meritxell Martí recomienda aplicar esta mezcla por la noche a modo de sérum.

Aún hay otra alternativa para sacar partido al limón, y es recurriendo a una infusión de agua con limón y pimienta si nuestro objetivo es estimular el metabolismo, así como adelgazar, aprovechando su acción antiinflamatoria.

Es uno de los alimentos considerados detox por excelencia. El agua templada ayuda por la mañana a primera hora ayuda a regular el tránsito intestinal, eliminar toxinas y depurar el organismo, así como a evitar el estreñimiento.

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También se puede realizar un exfoliante casero que puedes hacer de forma sencilla y que te ayudará a eliminar las células muertas de la piel de tu cuerpo. La clave es mezclar el jugo del limón con azúcar grueso y algún aceite como el de almendras dulces. Es muy útil sobre todo para codos, rodillas y pies, las zonas más secas o con rugosidades. 

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Un incómodo problema que puedes intentar evitar recurriendo a una receta casera. El limón puede ayudar a disminuir la gingivitis y además tiene acción bactericida, aunque Meritxell Martí remarca que siempre debemos tener la precaución de enjuagar la boca después.

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