Trucos para lavar la ropa hay muchos, desde mezclas de jabones hasta vinagre como suavizante, pero ¿alguna vez habías oído del azúcar? Suena raro, pero hay una nueva tendencia de limpieza que promete ahorrar tiempo y dinero: lavar con azúcar.

La gran mayoría tenemos azúcar en casa, pues no puede faltar para el café, té o algunas preparaciones dulces… Aunque claro, como explica el Ministerio de Salud y Protección Social de Colombia, esta debe consumirse con moderación para evitar los efectos negativos en la salud.

Sin embargo, más allá de su función como endulzante o su uso ocasional en mascarillas exfoliantes, el azúcar suele quedarse en su recipiente. La buena noticia, es que puedes aprovecharla en la limpieza, por ejemplo, al lavar ropa.

El azúcar es una gran aliada para eliminar algunas manchas en la ropa, por ejemplo, las de pasto. Basta hacer una pasta de azúcar con agua tibia, aplicarla en la mancha y dejar actuar por una hora antes de lavar… Pero hay más, también puedes ponerla en tu lavadora con cada carga de ropa.

Por extraño que parezca, expertos en limpieza han encontrado que el azúcar ayuda a cuidar las prendas, además de tener propiedades antimanchas sin dañar los tejidos como lo hace el cloro. Incluso, podría ayudar a avivar el color de la ropa desteñida.

Eso sí, no sustituye el uso de detergente o suavizante, simplemente es un ingrediente para potenciar sus efectos.

Si bien no hay evidencia científica sobre el uso del azúcar para lavar la ropa, usarla no hará mayor daño, pues la cantidad es mínima y sus beneficios podrían ser mayores. Eso sí, recuerda enjuagar muy bien tu ropa.

El cloro es un ingrediente que destaca no solo por su capacidad de desinfección, sino por blanquear y eliminar manchas. Sin embargo, debe usarse con cuidado. En primer lugar, porque no aplica para todas las prendas y, en segundo, por sus efectos a la salud.

Como explica el American Cleaning Institute, este debe usarse básicamente en prendas blancas, más no todas las de este color son aptas. El tipo de tela, es decir, si es de seda, lana o spandex y los acabados, pueden impedir su uso.

Por lo tanto, es importante leer la etiqueta y confirmar si permite el uso de blanqueador o cloro.

Por otro lado, el cloro, ya sea presente en blanqueadores o solo, debe manejarse con cuidado, pues puede resultar tóxico, ya que reacciona con el agua, como subraya la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.

La consecuencia son daños respiratorios y pulmonares, así como la irritación de ojos, nariz y garganta. Cuando uses cloro, sin importar para qué, siempre sigue las instrucciones y hazlo en un lugar ventilado, evitando mezclarlo con otros productos de limpieza.

Pon a prueba este truco con azúcar para lavar la ropa y cuéntanos si amaste tanto como nosotros los resultados.